Nuestro alojamiento durante esas noches no fue un hotel o un apartamento al uso… ¡Fue un barco! En el puerto deportivo de La Línea de la Concepción se encuentran instalados unos barquitos que cumplen la función de habitación de hotel.
Tienen mucho encanto tanto por fuera como por dentro y además cuentan con unas vistas maravillosas al Peñón de Gibraltar. Su interior está completamente equipado con cocina, baño… y tiene dos literas y una cama doble, por lo que sirve para hasta cuatro personas.
Nosotros íbamos con el temor a marearnos, pero el barco, al estar varado en el puerto, apenas se mueve. De todas formas, nosotros nos tomamos una biodramina sin cafeína cada noche antes de dormir y de esa forma nos aseguramos de descansar de lujo.
